Sony se ha pronunciado al respecto de las acusaciones de discriminación en el entorno laboral de PlayStation. Estas acusaciones, por si no lo tenéis muy presente, surgieron a raíz de una demanda que interpuso una ex-empleada de la compañía durante el mes de noviembre del año pasado. Además, no hace tanto, unas ocho trabajadoras añadieron sus testimonios a la mencionada demanda.
Al parecer, según la información que ha publicado Axios, Sony se estaría tomando estas declaraciones muy en serio, o al menos eso indicarían los documentos legales que han podido ver desde el medio citado. «Aunque la mayoría son de ex-empleadas que ya no trabajan en SIE, SIE ha abordado o abordará los problemas planteados en ellos a su debido tiempo, ya que SIE valora a sus empleadas y toma medidas proactivas para garantizar que tengan todas las oportunidades para prosperar y ser escuchadas«.
Volviendo a la demanda que originó todo esto, la cual fue presentada por Emma Majo, ex-analista de seguridad de Sony; la compañía decidió desestimar la mencionada denuncia porque señalaban que era «una acusación inapelable de actividades comunes y personales«, según han informado desde Axios.
Desde Polygon ampliaron información de la mencionada demanda y sus testimonios. Según ellos, las declaraciones incluyen acusaciones de que los empleados calificaban a las mujeres de la compañía por sus apariencias, iban a clubs de striptease durante la hora de la comida y compartían «chistes e imágenes sucias de mujeres». A estas barbaridades, hay que añadir lo que comentaba una de las mujeres que trabajaba en Sony, ya que aseguraba que no podía darle el pecho a su bebé porque no había privacidad para ello.