Y piden ayuda con unos fondos de protesta
Si bien los afectados en el caso de las acusaciones de acoso sexual, discriminación de género y acoso laboral en Activision Blizzard critican la inacción por parte de la compañía, los empleados siguen coordinándose para aumentar la presión sobre sus líderes. El grupo de trabajadores bajo el nombre de ABK Workers’ Alliance ya anunció una protesta indefinida en solidaridad con los despedidos del departamento de control de calidad que ha trabajado en Call of Duty: Warzone.
No obstante, esta alianza no está oficialmente reconocida, por lo que no tendrá las protecciones asociadas a los sindicatos. La dirección de Activision Blizzard comunicó que no dará más soporte a las protestas, lo que significa que los empleados que no acudan a sus puestos de trabajo ya no serán pagados. Por esta razón, los miembros de la ABK Workers’ Alliance afirman haber empezado a preparar los documentos para poder optar al reconocimiento a nivel sindical.
Mientras tanto, se han pronunciado en redes sociales para pedir ayuda en forma de unos fondos de protesta:
En las primeras 14 horas, la campaña se acerca ya a los 100.000 dólares, una décima parte de su objetivo final de un millón. Los representantes de la ABK Workers’ Alliance explican que por ahora sus peticiones han sido ignorados por la empresa. Refiriéndose a los despidos, entre otros, explicaron: «Estas y muchas otras incidencias han llevado a una alianza de empleados de Activision-Blizzard a iniciar un parón de trabajo hasta que se satisfagan las demandas y finalmente se le dé un lugar a la representación de trabajadores en la compañía».